Queridos amigos y socios de la Misión en Grecia y el resto del mundo,
Con nuestro más caluroso saludo en Cristo, nos gustaría informaros sobre los esfuerzos misioneros de nuestra Iglesia Ortodoxa de Uganda. Os agradecemos de antemano toda la ayuda que habéis ofrecido, ya fuera grande o pequeña, y especialmente por vuestras oraciones y vuestro amor por el trabajo de esta Misión. Entre las necesidades que dicta nuestro amor a Cristo y Su Palabra de recorrer el mundo y transmitir Su Mensaje, incluimos el esfuerzo del Santo Monasterio de Nuestra Señora de Chrisopigi en Polydendri (Ática), que ha trabajado durante muchos años no sólo por caridad Ortodoxa, sino también por las necesidades básicas de cualquier ser humano, sin tener en cuenta su posición espiritual.
Cada verano, voluntarios de Grecia (médicos, enfermeras, estudiantes universitarios y jóvenes en general) viajan a este país para ofrecer su conocimiento y sonrisas organizando un campamento para todo el pueblo que incluye cursos de higiene, primeros auxilios y cultivo de semillas, entre otras actividades, para gradualmente mejorar su propio estilo de vida. De manera simultánea, hemos creado un proyecto de apoyo a los reclusos de la cárcel de Sedema, y estamos recolectando fondos para cubrir los medicamentos que necesitan para tratar la malaria los más necesitados. También estamos manteniendo nuestro programa del Colegio de Acogida que ayuda a dar acceso a educación y alimentación diaria a 150 niños con la ayuda de familias griegas.
Con nuestro más caluroso saludo en Cristo, nos gustaría informaros sobre los esfuerzos misioneros de nuestra Iglesia Ortodoxa de Uganda. Os agradecemos de antemano toda la ayuda que habéis ofrecido, ya fuera grande o pequeña, y especialmente por vuestras oraciones y vuestro amor por el trabajo de esta Misión. Entre las necesidades que dicta nuestro amor a Cristo y Su Palabra de recorrer el mundo y transmitir Su Mensaje, incluimos el esfuerzo del Santo Monasterio de Nuestra Señora de Chrisopigi en Polydendri (Ática), que ha trabajado durante muchos años no sólo por caridad Ortodoxa, sino también por las necesidades básicas de cualquier ser humano, sin tener en cuenta su posición espiritual.
Por este motivo, nuestro grupo de caridad del Santo Monasterio está comprometido desde el corazón con la recolecta de alimentos, medicamentos y ropa que se necesitan ahora en los espacios comunes y actividades en Grecia. Algunas actividades del grupo incluyen el reparto de ropa a los necesitados y de medicamentos a las farmacias de las cárceles, el envío de ropa a la Misión de Madagascar y a pueblos del Norte del Épiro, y la asistencia a los presos que han acabado su condena para que vuelvan con sus familias.
Nuestro esfuerzo en Uganda es una parte importante en nuestros corazones. En 2012, un grupo de personas viajó a Uganda y, con la fuerza de Dios y con la ayuda de muchos griegos concienciados, empezamos a ayudar en las áreas de difícil acceso. Tras 4 años, habíamos creado una pequeña parroquia Ortodoxa en el pueblo de Luguzi (Uganda), la Santa Iglesia de San Espiridón; un centro médico de una sola sala que ofrece servicios a todos los nativos sin discriminación de credo y una pequeña granja con tierras que se cultivan para ayudar a los pobres del pueblo. Ahora estamos también preparando la construcción de una Escuela Primaria y de un Instituto de Educación Secundaria.
Cada verano, voluntarios de Grecia (médicos, enfermeras, estudiantes universitarios y jóvenes en general) viajan a este país para ofrecer su conocimiento y sonrisas organizando un campamento para todo el pueblo que incluye cursos de higiene, primeros auxilios y cultivo de semillas, entre otras actividades, para gradualmente mejorar su propio estilo de vida. De manera simultánea, hemos creado un proyecto de apoyo a los reclusos de la cárcel de Sedema, y estamos recolectando fondos para cubrir los medicamentos que necesitan para tratar la malaria los más necesitados. También estamos manteniendo nuestro programa del Colegio de Acogida que ayuda a dar acceso a educación y alimentación diaria a 150 niños con la ayuda de familias griegas.
Nos encantaría dedicar ahora un momento a pensar en Peter, un chico con necesidades especiales y una sonrisa única. Este año consiguió un sitio en el que vivir y la oportunidad de ir a la Escuela tras 7 años viviendo en la calle. En pocas palabras, esta es nuestra Misión en Uganda, un país con una esperanza de vida de 45 años, el 3er país más pobre del mundo, el país de miles de niños que fueron creados por el "Dios de chocolate", un país que no aguarda a que tu le enseñes para él enseñarte a ti lo que significa amar, dar y recibir. A veces nos preguntamos si estamos haciendo suficiente en esta zona del mundo donde la esperanza de vida media es tan baja. Muchas veces pensamos si hay alguna razón para nosotros, y encontramos la respuesta: Somos una gota en un océano. Pero el océano está formado por muchas gotas. Con la ayuda de Dios y con vuestro amor, nosotros continuamos. Gracias
Nuestra Misión continúa…
Formas de apoyo económico de nuestro esfuerzo: (Para la Misión internacional) Santo Monsaterio de Nuestra Señora de Chrisopigi, P.O box 49 19014 Kapandriti (Ática - GRECIA)
Banco Nacional (Ethniki Trapeza): 656/201115-56
En nombre del padre espiritual de nuestra Misión, George Nyombi.
Muchas gracias.